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ACADEMIA

Efectivamente, quieren que desaparezca la Sociología

Lo que me temía y excpresaba ayer mismo en este blog, tiene todos los visos de materializarse. La Red de Departamentos de Sociología (los que nos reunimos en Madrid) acaba de difundir esto: "Tenemos noticias de que en la Conferencia de Rectores está prosperando la idea de proponer un grado único de Ciencia Política y Sociología. Sería conveniente que todos los Departamentos que suscribimos el acuerdo de Madrid de 19 de febrero, y aquellos que hasta la fecha se han sumado al mismo, hicieramos llegar a los rectores de nuestras respectivas universidades dicho acuerdo para que estén bien informados de nuestra opinión. Rogamos procedáis en ese sentido lo antes posible". Personalmente creo que habría que ir más allá, y que tenían que llover las protestas de los sociólogos no sólo españoles, sino de todo el mundo, por ese intento, a la Conferencia de Rectores (rector@rectorado.uniovi.es) y a la ministra de educación (mjsan@eco.uc3m.es); manifestándoles la indignación porque en España pueda desaparecer la titulación de Sociología.

Tras la reunión en Madrid de Departamentos de Sociología...

Mal plan. Supuestamente se trata del futuro de la propia titulación de Sociología, y estábamos 12, de no más de 10 universidades. Primer indicador deprimente. Se persigue obsesivamente una especie de re-unificación por la puerta trasera con Políticas (¿porque ellos SÍ tienen clientes, como ahora se llama a los alumnos?). Se echa en falta un sentimiento de identidad clara... ¿Será porque la propia Area de Sociología es una especie de sumidero a donde han acudido y acuden en busca de cobijo (un título, una placita de funcionario, una cátedra...) tantas gentes de las más dispares procedencias? Siempre me ha resultado difícil explicar a qué me dedico, pero tengo clara mi condición de sociólogo...incluso antes de serlo oficialmente. ¿Por qué encuentro tantas dudas, tanta inseguridad, en el ámbito de la Academia? Dicen que el Libro Blanco de la titulación lo están haciendo, en representación de Facultades de Sociología, gentes que en su mayoría no son sociólogos. ¿Cabría algo así con la titulación de Economía, o de Psicología, o de Enfermería? ¿Por qué, institucionalmente, corporativamente, somos tan cutres los sociólogos? No me extraña que luego haya catedráticos que nunca estudiaron Sociología negando sexenios a sociólogos; catedráticos que nunca estudiaron Sociología negando titularidades o cátedras de Sociología, a sociólogos... Aquí cada cual se ha hecho su ranchito, y sólo se preocupa del pasto para sus vaquitas.

Sí..., al final, quizás sea mejor que termine cuajando ese intento de introducir un grado en Ciencias Sociales, y que finalmente nos terminemos diluyendo en eso, o en los Estudios Culturales. Tomando a la Sociología como un colectivo académico/profesional, realmente nos merecemos lo que tenemos: un camino que va desde la nada hacia la más absoluta miseria. O como decía Gaviria, "es que estamos más perdidos que el barco de la canela"... Será eso.

Ah... De lo que iba el asunto. Acordamos solicitar la existencia de un grado en Sociología, de tres años (Portugal por ejemplo ha optado por cuatro, pero también es cierto que ellos tienen demanda, por algo será), con no más de un 60% de troncalidad (la misma del último plan de estudios), para poder jugar a alianzas con otras Areas (Políticas, Políticas y Políticas, uf) y generar dobles titulaciones en cuatro años. Esto fue el día 19, por supuesto en Madrid.

Como decía mi abuela: hacer y deshacer... todo es quehacer.

AL FIN, EMPIEZA LA DEMOLICIÓN DE LA CONTRAREFORMA

Si hace unos días me sublevaba ante el borrador de Decreto Ley sobre la regulación de los estudios de Grado y Posgrado que ha circulado por la web, hoy debo proclamar mi alegría porque finalmente el gobierno no está resultando ser tan afín a la contrareforma universitaria del PPCastillo como nos estábamos temiendo. En el ministerio han sido sensibles a las protestas de unos y otros, y finalmente el Decreto publicado en el DOE ni siquiera hace referencia en ningún momento a los miserables sexenios. ¡Chapeau por la Ministra! Empiezo a sentirme -¿por qué no decirlo?- a gusto con mi gobierno; ojalá no nos den motivos para cambiar de opinión.

Sexenios, postgrados y doctorados: el círculo que se cierra

Finalmente se ve por qué era tan importante la telaraña de control caciquil de los sexenios en la Universidad, y su estrecha imbricación con la reforma universitaria emprendida por el PP y, hoy por hoy, mantenida en lo sustancial por el PSOE. Mediante la nueva ley de grados y postgrados el control de la docencia de segundo y tercer ciclo retorna a manos de los de siempre: los mismos que se reparten los sexenios. Creo que en las informaciones que han circulado en torno a la dinámica de la adaptación al Espacio Europeo no se ha sido conscientes de esto. Valdría la pena informar explícitamente a los firmantes del manifiesto, para que redoblen esfuerzos en multiplicar las firmas y denuncias, del artículo 13 del

BORRADOR DE ANTEPROYECTO DE REAL DECRETO POR EL QUE SE REGULAN LOS ESTUDIOS UNIVERSITARIOS OFICIALES DE POSTGRADO Y LA OBTENCIÓN Y EXPEDICIÓN DE LOS TÍTULOS OFICIALES DE MÁSTER Y DE DOCTOR

""Artículo 13. Desarrollo de los programas oficiales de postgrado. 1. Los programas oficiales de postgrado serán autorizados por la comisión de doctorado, a propuesta del órgano que se responsabilice de cada uno de ellos, especificando los cursos y trabajos de iniciación a la investigación tutelados que se realizarán bajo la dirección de dicho órgano.
Las universidades definirán las atribuciones y responsabilidades de los órganos a que alude el párrafo anterior, en lo que se refiere a los estudios oficiales de postgrado. 2. Existirá un director único por cada programa oficial de postgrado, que deberá ser doctor y tener reconocidos, al menos, dos periodos de actividad investigadora de acuerdo con las previsiones del Real Decreto 1086/1989, de 28 de agosto, de retribuciones del profesorado universitario.
Excepcionalmente, y para determinados programas oficiales específicos de postgrado que determine la comisión de doctorado, podrá ser director quien, previa evaluación de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación, cuente con un currículum investigador equivalente al indicado en el párrafo anterior. 3. Para que un programa oficial de postgrado pueda ser autorizado por la comisión de doctorado, el conjunto del profesorado que participe en el mismo, que tenga una relación funcional o permanente con la universidad, deberá ser doctor y tener reconocido, como media, al menos, un periodo de actividad investigadora de acuerdo con las previsiones del Real Decreto 1086/1989, de 28 de agosto. El resto del profesorado que participe en el indicado programa deberá, asimismo, ser doctor y poseer, previa evaluación de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación, un curriculum investigador equivalente al indicado en el inciso anterior.""

Definitivamente, avanza a pasos forzados la hoja de ruta nunca explicitada, pero sí latente, y claramente implícita en buena parte de los procesos montados en torno a la Universidad española en los últimos años: devolver a los cinco grandes centros universitarios de siempre todo el poder de la Academia (y, naturalmente, la clientela, los alumnos perdidos), y reducirnos, a las universidades periféricas, a la función que tuvieron en las capitales provinciales los institutos de secundaria durante la primera mitad del siglo XX. Ahora nos tocaría prepararles a los niños (porque cada vez llegan más infantilizados) con el grado, y enviárselos luego a que hagan el postgrado y el doctorado.

¿Se estará formando, ya que evidentemente no está aún entre nosotros, el Joaquín Costa que denuncie con claridad, tino y sobre todo éxito, los males del caciquismo universitario español en el siglo XXI?